ABB publicó hoy un nuevo reporte en el que pone de manifiesto el potencial de conseguir mejoras significativas de la eficiencia energética en industrias e infraestructuras equivalentes a un 40% de la meta planteada en el Acuerdo de París para 2040 en reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Respaldada por el estudio, la compañía pide a gobiernos e industrias que aceleren la adopción de tecnologías para ayudar a frenar el cambio climático.
Según la Agencia Internacional de la Energía (AIE), la industria es responsable del 37 por ciento del consumo mundial de energía y aproximadamente el 30 por ciento de la energía mundial se consume en edificios.
Aunque no suelen estar a la vista del público, hay motores eléctricos y convertidores de frecuencia que optimizan su funcionamiento, integrados en prácticamente todos los espacios construidos. Mantienen en funcionamiento un enorme abanico de aplicaciones básicas para nuestra forma de vida actual: desde bombas, ventiladores y cintas transportadoras industriales en sistemas de producción y propulsión, hasta compresores para aparatos eléctricos y sistemas de climatización de edificios.
La tecnología de los motores y convertidores ha avanzado significativamente en la última década, y los diseños innovadores de hoy en día ofrecen eficiencias energéticas importantes. Sin embargo, un número considerable de sistemas industriales accionados por motores eléctricos aún en servicio – hablamos de unos 300 millones en todo el mundo – no son eficientes o consumen mucha más energía de la necesaria, lo que supone un ingente desperdicio energético.
Este estudio independiente estima que, si se procediera a sustituir estos sistemas por equipos optimizados de alta eficiencia, las ganancias obtenidas podrían reducir el consumo mundial de electricidad en hasta un 10 por ciento. A su vez, esto representaría más del 40 por ciento de la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero que hay que alcanzar para cumplir los objetivos climáticos establecidos por el Acuerdo de París para 2040.
«Por sí sola, la eficiencia energética industrial tiene más capacidad que ningún otro ítem actual para hacer frente a la emergencia climática. Básicamente, representa la solución climática invisible para el planeta», afirmó Morten Wierod, presidente del área de negocio de Motion de ABB. «Para ABB, la sostenibilidad es un elemento clave de su propósito y del valor que generamos para todas las partes interesadas. Nuestras tecnologías de vanguardia reducen el consumo energético en industria, transporte y edificios. Con estas tecnologías conseguimos el mayor impacto, con diferencia, que podemos tener en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero».
Ya se han dado pasos importantes para fomentar el uso de vehículos eléctricos y fuentes de energía renovables. Ahora, ABB considera que ha llegado el momento de hacer lo mismo para lograr una tecnología industrial que va a brindar beneficios incluso mayores para el entorno y la economía mundial.
«Nunca se resaltará lo suficiente la importancia de que industrias e infraestructuras pasen a adoptar motores y convertidores de alta eficiencia energética y así contribuir a crear una sociedad más sostenible», añadió Morten Wierod. «El 45 por ciento de la electricidad mundial se utiliza para alimentar motores eléctricos en edificios y aplicaciones industriales. Por lo tanto, los beneficios en materia de eficiencia superarán con creces toda inversión que se haga en mejorar y actualizar esos motores».
ABB evalúa con frecuencia el impacto neto que tienen en la eficiencia energética mundial sus propios motores y convertidores de alta eficiencia ya instalados. En 2020, se consiguió un ahorro eléctrico de 198 teravatios/hora, el equivalente a más de la mitad del consumo anual del Reino Unido. Para 2023, gracias a los motores y convertidores de ABB, se calcula que los clientes ahorren a nivel mundial otros 78 teravatios/hora de electricidad al año, prácticamente el consumo anual de Bélgica, Finlandia o Filipinas, y por encima del consumo anual total de Chile.
Las políticas reguladoras son uno de los principales factores que empujan a la industria a invertir en eficiencia energética en todo el planeta. Este año entra en vigor el reglamento de la Unión Europea sobre diseño ecológico (UE 2019/1781), que establece unos rigurosos requisitos para una creciente gama de motores de eficiencia energética. Pero muchos países todavía no han tomado ninguna medida.
A fin de aprovechar las increíbles oportunidades que ofrecen los motores y convertidores de eficiencia energética para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, todas y cada uno de los diferentes ámbitos sociales desempeñan un papel fundamental:
- A nivel público, los responsables de tomar decisiones y organismos reguladores gubernamentales tienen que incentivar una adopción rápida;
- Negocios, ciudades y países tienen que ser conscientes tanto del ahorro de costos como de las ventajas medioambientales, y mostrarse dispuestos a invertir; y
- Los inversores tienen que redistribuir el capital y asignarlo a las compañías mejor preparadas para abordar el riesgo climático.
«Aunque en ABB nuestro papel siempre es ofrecer a los clientes las tecnologías, productos y servicios más eficientes, y vamos a seguir innovando para lograr una mayor eficiencia, esto por sí solo no basta. Todos los organismos de nuestra sociedad tienen que trabajar de forma conjunta para transformar de manera holística nuestro uso de la energía. Al actuar e innovar juntos, podemos mantener en marcha servicios fundamentales y, al mismo tiempo, ahorrar energía y luchar contra el cambio climático», concluye Morten Wierod.
Puede descargar aquí el informe técnico de ABB Achieving the Paris Agreement: The Vital Role of High-Efficiency Motors and Drives in Reducing Energy Consumption (Cumplimiento del Acuerdo de París: El importante papel de motores y convertidores de alta eficiencia para reducir el consumo energético).
Foto: Las aplicaciones de bombeo como estas están ampliamente dispersas a lo largo de todas las industrias y edificios y son un objetivo primario para alcanzar ahorros de energía.