Con el lanzamiento del satélite Hugo, de GHGSat entró en funcionamiento un nuevo sensor óptico de ABB, el nuevo y claro referente en servicios de detección de gases de efecto invernadero en el espacio.
El sensor óptico suministrado por ABB puede mapear desde el espacio las emisiones de metano con una definición cien veces mayor que cualquier otro. Antes solo era posible estudiar regiones de mayor tamaño, pero ahora, por primera vez, se cuenta con un nuevo nivel de detalle que permite identificar la fuente de emisiones. Actualmente, en ABB se están fabricando otras nueve unidades, que a finales de 2022 ya estarán listas para ir a bordo de la primera constelación de satélites privada dedicada a la medición de emisiones.
El espacio ofrece el lugar perfecto para monitorizar con libertad las emisiones en las diferentes jurisdicciones e informar sobre mejoras cuantitativamente. Los sensores de ABB van a proporcionar información muy valiosa que permitirá a gobiernos e industrias de todo el mundo cumplir sus objetivos de reducción de emisiones y disminuir el impacto negativo en el calentamiento global.
«Elegimos a ABB por su capacidad tanto para proporcionar instrumentos de talla mundial como para adaptarse a los retos de una nueva compañía espacial como la nuestra», afirmó Stephane Germain, CEO de GHGSat. «Aspiramos a innovar para dar respuesta a las necesidades del futuro y es un placer trabajar con ABB para lograrlo. Estamos encantados de que nuestra colaboración con ABB continúe».
«ABB comparte el objetivo de GHGSat de reducir las emisiones con la creación de su sensor de detección de gases de efecto invernadero. El hecho de que nos hayan elegido para fabricar estos sensores tan avanzados deja patente nuestra competitividad y nuestra total adaptación a los requisitos del sector espacial privado», afirmó Marc Corriveau, director general de ABB, Medición y Análisis, Canadá.
«La revolución espacial está en pleno desarrollo y ABB, con su patrimonio de instrumentos espaciales únicos y producción en serie de sensores de medición avanzados para aplicaciones industriales, ocupa una posición idónea para atender a este sector emergente», añadió.
GHGSat anunció la concesión a ABB del contrato para la producción de sensores en octubre de 2020 y las primeras entregas se realizarán en 2021. La unidad lanzada por SpaceX era una unidad individual que GHGSat compró a ABB hace dos años, antes entregarles la concesión.
Con su participación en la misión canadiense SCISAT y en la serie de satélites GOSAT de Japón, ABB lleva más de dos décadas al frente del trabajo de detección de gases de efecto invernadero desde el espacio. Los equipos ópticos de ABB que ya están en el espacio acumulan más de cien años de fiable funcionamiento. El sensor de SCISAT rastrea desde 2003 cambios sutiles a largo plazo en la composición de la atmósfera de la Tierra hasta de un tamaño de partes por billón de más de setenta moléculas y contaminantes. Agencias meteorológicas de todo el mundo basan sus predicciones en equipos de ABB que vuelan a bordo de satélites meteorológicos (NPP y JPSS) de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) estadounidense, lo que llega a salvar vidas al mejorar la puntualidad y precisión de las previsiones meteorológicas con una antelación de hasta siete días.
Además, ABB también es líder mundial en la monitorización terrestre de emisiones en continuo, con más de 60.000 sistemas instalados en más de 50 países de todo el mundo. Los sistemas de monitorización de emisiones en continuo (CEMS) registran y evalúan datos sobre emisiones en todas las industrias. Aportan información importante para la explotación económica y medioambiental de las plantas de producción. La gama incluye el ACF5000, que monitoriza con suma precisión y fiabilidad hasta 15 componentes gaseosos al mismo tiempo.