Desde hace décadas le llaman el combustible del futuro. Ahora en su versión “verde” podría convertirse en una opción sostenible al petróleo y Chile está en el top 3 de los países con condiciones para ser productores y exportadores de este vector energético.
El hidrógeno es un elemento abundante en la Tierra, pero muy difícil de obtener. Una de las formas de conseguirlo es a través de un proceso llamado electrólisis, que separa las moléculas de oxígeno e hidrógeno del agua. Esta técnica requiere de grandes cantidades de energía, las que si provienen de fuentes renovables lo convierten en un combustible verde. “En ABB estamos presentes con nuestra tecnología en la generación de energías renovables y almacenamiento de energía; en la producción, almacenamiento y distribución de combustibles; en la electromovilidad; en el transporte marítimo y gestión de puertos, etc. así que con nuestras soluciones y experiencia creemos y queremos ser parte del desarrollo de la industria del hidrógeno verde en Chile” asegura Daniel Andrade, Digital Market Manager de ABB en Chile.
¿Qué usos tiene este combustible? Explica que es utilizable en el transporte marítimo, de ferrocarriles, de buses y de alta capacidad o camiones mineros, además de usos industriales, como la producción de amoníaco para fertilizantes.
“Entre las diversas soluciones que ABB actualmente trabaja en la industria del hidrógeno destacan nuestros conocidos sistemas de control distribuido y el rectificador necesario para el proceso de la electrólisis”, comenta.
Chile, actor importante en la producción de hidrógeno verde
El uso de este combustible tiene diversos impactos positivos en el medio ambiente. Entre estos, Andrade destaca, en primer lugar, que el hidrógeno es un elemento que se encuentra en abundancia en el planeta, principalmente en el agua, como también en algunos combustibles fósiles, que es donde hoy tradicionalmente se extrae. Otro punto a favor considera que para el proceso de electrólisis no se requiere de mucha agua.
“Si bien la idea es que la energía provenga de energías renovables y se requiere poca agua para la producción de hidrógeno verde, el problema de la sequía y cambio climático en el país puede llevar a que producir hidrógeno sea “la gota que secó el vaso”. Para evitar esto se debe hacer una debida trazabilidad tanto de la huella de carbono y agua de todos los proyectos, donde además se podría dejar disponible está información para la ciudadanía, sumado a una buena gestión del agua y de la energía. A esto podemos contribuir con nuestras soluciones de Scada y DCS.”, afirma.
Andrade comenta que nuestro país tiene un gran potencial en la producción de este combustible, considerando que el Gobierno y los diferentes sectores políticos, proponen en su agenda potenciar las energías renovables, y con esto, la industria del hidrógeno verde.
“A escala local, el objetivo es lograr cierta independencia de los combustibles fósiles, para disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero y, de esa manera, reducir nuestra huella, además debemos potenciar a que cada región tenga su propia forma de contribuir. Debemos redoblar los esfuerzos para cumplir lo más pronto con nuestra meta país de ser carbono neutral. Y en ese camino, se espera que el hidrógeno sea un actor relevante para lograrlo”, enfatiza Andrade.
En el marco de cómo ABB en Chile está aportando en la cadena de valor de este combustible, Andrade anuncia: “Recientemente nos incorporamos a ´H2 Chile Asociación Gremial´. Somos una de las 11 primeras empresas miembro orientadas a impulsar la industria del hidrógeno en nuestro país y ya estamos participando en las mesas técnicas de hidrógeno que está impulsando el Gobierno de Chile. Por lo demás, nuestros principales clientes de generación de energía han anunciado una estrategia del hidrógeno, por ejemplo, Enel, AES Gener y Colbún, a quienes debemos seguir entregando soporte con nuestras soluciones”.
“Tenemos la tecnología y el conocimiento para aportar en toda la cadena de valor del hidrógeno verde”, asegura Andrade, mencionando algunos de los diversos proyectos que tienen como protagonista a este combustible y en los que ABB está prestando sus servicios, en países como Australia, Suecia y Francia.
Uno de estos es el proyecto piloto “Hydrogen Energy Supply Chain” (HESC), que tiene como objetivo producir hidrógeno limpio de manera segura y eficiente en Australia, y transportarla a Japón, un proceso en el que ABB entregará soluciones de automatización, electrificación e instrumentación para la cadena de suministro de energía de hidrógeno.
Otra iniciativa interesante está en Francia. Lhyfe, empresa productora y proveedora de hidrógeno verde, escogió a ABB para implementar una solución de automatización en su primer sitio de producción. Esto a través del sistema de control distribuido Freelance y la plataforma digital ABB AbilityTM Manufacturing Operations Management (MOM). Estas soluciones controlarán todos los elementos involucrados en el proceso de producción de hidrógeno en el sitio de Bouin en la región de Vendée.